La captura de Erick Moreno, alias “El Monstruo”, en Paraguay fue resultado de un trabajo coordinado de inteligencia internacional. Según fuentes oficiales, la clave estuvo en el seguimiento a sus movimientos financieros y contactos cercanos, que finalmente permitieron ubicarlo en territorio paraguayo.

Moreno, sindicado por delitos de trata de personas y abuso sexual, llevaba meses huyendo de la justicia peruana, pero los reportes de cooperación entre autoridades de ambos países aceleraron su ubicación.

El caso refleja la importancia de la colaboración policial transnacional en la lucha contra el crimen organizado y abre la puerta a nuevas investigaciones sobre las redes que facilitaron su fuga.

Actualmente, el proceso de extradición al Perú está en marcha para que “El Monstruo” enfrente las graves acusaciones en su contra.